Recorrido por la música y el activismo de parte de la comunidad hip-hop
de los suburbios de Santiago. Conocemos a una comunidad de jóvenes de
dedicación inquebrantable, que con trabajo duro y casi ningún recurso
económico utiliza las cuatro ramas de la cultura hip-hop (el rap, el
grafiti, el breakdance y el discjockeo) para crear conciencia,
sacar a la luz una perspectiva alternativa de la historia y el vigente
orden neoliberal, y crear una nueva identidad para sí mismos como
pobladores. Su voz crítica y su admirable capacidad de autogestión son
inspiradoras muestras de cambio.
De estas características es un perfecto ejemplo el corto Labyrinth, al
que pertenecen las capturas que encabezan la entrada. Realizado en
cut-out, con cientos de ilustraciones de grabados antiguos, que lo
situan por tanto, en ninguna parte y en todas al mismo tiempo, los
vagabundeos de un hombre libre a una supuesta ciudad ideal, sirven para
revelar como toda la grandeza humana lo único que oculta son las mayores
bajeza, la abyección consentida, la lucha del hombre contra el hombre
donde sólo los peores sobreviven, pero sobre todo, como toda diferencia
debe ser eliminada y aplastada, sino puede ser convertida, por esos
mismos peores, temerosos de ser descubiertos y derribados.
La película se desarrolla en el mundo del espectáculo. Esta es la historia de Pablo, un boxeador enamorado de su esposa Aurora. Esta última mantiene una relación adúltera con un cantante de cabaret. Cuando Pablo sorprende a los amantes, solicita el divorcio y entra en una profunda depresión que lo llevará a perder un combate de boxeo. Es entonces cuando conoce a Marlène, una artista de variedades, cuyo papel consiste en bailar desnuda en una jaula con cuatro leones, y que está unida sentimentalmente con su compañero de trabajo, el domador Marck.12
Los hechos se precipitan cuando Marck intenta agredir a Pablo, quien no solo no se aleja de Marlène, sino que asiste asiduamente a su show. Un día Pablo es víctima de un atentado que la policía atribuye al entrenador, pero gracias a la intervención de Perragorda (un niño adoptado por Pablo) se descubre la verdadera identidad del agresor
¡Nosotros somos así! es un híbrido de película de entretenimiento, cine didáctico y folletín ideológico, cuyas partes no terminan de ensamblar, pero es también una de las producciones más insólitas del Sindicato de la Industria del Espectáculo durante la Guerra Civil Española. Los números musicales remiten al cine popular independientemente de que éste sea el procedente de Hollywood con Shirley Temple como portaestandarte o la castiza zarzuela. Un sencillo encadenado entre el arranque de un número musical –con los niños de paisano- y su ejecución –con vestuario y atrezzo ad hoc- sirve además para subrayar el poder a la vez evocador y mistificador del cinema. Una hoja de almanaque con la fecha del 19 de julio da paso a un breve montaje en el que las imágenes documentales del ambiente de la resistencia popular a la sublevación militar enlazan, sin solución de continuidad, con escenificaciones de la participación de las mujeres en la lucha, un tema que será clave en la asamblea infantil que cierra la película.
En paralelo, el folletín policial del niño rico, que debe recuperar el documento que incrimina a su padre en labores de espionaje a favor del enemigo. La interpretación enfática, la iconografía, la ambientación contrapuesta del hogar burgués y del modesto piso donde vive la familia trabajadora, todo… evoca las estampas de los libros infantiles. Imaginería de devocionario, que sirve también para la propagación del credo libertario. Y, por último, la asamblea, con sus reivindicaciones humorísticas –ese ¡Muera Pitágoras!- y su debate sobre la igualdad de sexos y la superación de los prejuicios de clase, que son fruto de una educación injusta y segregadora desde su base. La película concluye con una moraleja rimada que se resume en el cántico infantil "¡Nosotros somos así!", que sirve de ejemplo a los adultos.
La historia sigue a una niña, cuyo nombre nunca se revela, quien guarda
celosamente un huevo de contenido desconocido, en un mundo surrealista
post apocalíptico. Ella ocupa su tiempo recolectando botellas por la
ciudad y llenándolas con agua. Un hombre montado en una caravana de
máquinas que porta una especie de arma en forma de cruz encuentra a la
niña y comienza a seguirla, ella se da cuenta de que ha extraviado el
huevo, el hombre aparece entonces y se lo devuelve. Él le pregunta qué
hay dentro del mismo. Ella no responde a la pregunta.
Un gato macho corteja a una gata y forman una familia juntos. Vemos que
los gatitos nacen y son nutridos por la madre, mientras que el papá,
orgulloso e interesado, les brinda su apoyo.