Repensando la aurora.
Imagínate que despiertas con una segunda oportunidad: la arruca azul, pregonando una hermosa mercancía, el roble aun esta en pie y despliega su gloriosa sombra. Si no miras hacia atrás el futuro nunca ocurre. Que bueno es levantarse bajo la luz del sol, con el generoso aroma de los panecillos, huevos y salchichas en la parrilla. El cielo entero es tuyo para que sobre el escribas, abierto de golpe, una pagina en blanco. Vamos date prisa nunca sabrás quien esta allí abajo, quien fríe esos huevos, si no te levantas y ves.