Dharma

La noche huérfana puso sus pies sobre mi pecho estoy cansado - dije (sin respuesta) de este mundo de Miedo y apatía Ahora escucho el tren y pienso en Julián la Pampa el olor a tierra mojada y su guitarra con canciones de Sui Generis doy una calada al alcaloide los árboles ya no se mueven todo duerme mientras yo - apilo oferta Los milagros ocurren, sólo hay que estar despiertos - pienso... mierda! Hasta cuándo dejarán de pisarnos la enferma del sanatorio los ultra derechistas, los fascistas, los monopolios las corporaciones Sólo un humilde muchacho del sur de Argentina donde el viento come rostros y alambran campos a doquier con licencia mandataria pero que pertenecen al pueblo Verás que todo Cristo lleva su cruz en manos rabiosas en bocas amordazadas en ojos engasados Todo es una cuenta en el sol Él expele todos los días luz cadenciosa para nuestras pieles de monos pelados -con que lo vean los niños basta- y así, como no queriendo, vas envejeciendo junto a tus papeles tus libros, tus collages, tu música, tu scat perdiendo como todo buen perdedor (...) escribir poemas (...) es algo difícil pero es lo único que te salva de la mazmorra de afuera de la pecera drogas y alcohol ya no van con vos creciste sentaste cabeza y no digo que sea mejor digo que simplemente es la realidad

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