Cuenta la historia de una aldea rusa durante la Revolución de 1905. La
joven Hanna-Liebe (Polina Pickowska), que vive en un guetto judío en un
pueblo ruso, se ve forzada a abandonar su amistad con el joven Fedja
(Richard Boleslawski), que no es judío. Cuando se enamora de Sascha
(Thorleif Reiss), que tampoco es judio, Hanna le sigue a San Petesburgo.
Allí ella se une a su hermano Segal (Vladimir Gajdarov), y se entera de
que Sascha ha entrado a formar parte de un grupo revolucionario... La
película estuvo mucho tiempo perdida y está considerada como una de los
filmes más fascinantes de Dreyer